Este jardín de unos 4.000 m² está dedicado exclusivamente a la flora australiana. En efecto, más de 500 especies raras, venidas de todas las regiones de Australia conviven felizmente.
Creado en 2003, las paredes, los pasillos, los pavimentos y los revestimientos, están hechos de piedra del país y le aportan una unidad suplementaria que lo conecta completamente con la aldea.
Para conservar este espacio natural, y hacerlo cultivable se han traído 1000 m3 de tierra vegetal, así como bloques de piedra del país (Gneiss de Bormes) depositados en terrazas, en revestimientos, en muros y en pavimentos ciclópeos. Se añadieron muros de piedra seca a los muros existentes, imitando su rusticidad. Con el fin de armonizar el mineral, la arena de los callejones se recuperó en el lecho de nuestro río (La batalla). El riego está automatizado de tipo microirrigación (goteo), ahorra y optimiza las cantidades de agua según las necesidades de las plantas. La situación de este parque es ardiente, un mantillo natural y local a base de corteza de alcornoque triturado cubre toda la superficie del parque con el fin de limitar la evaporación del agua, la elevación de las malas hierbas, y la compactación del suelo.
Acceso libre y gratuito.
Abierto todo el año de 8:00 a 6:00.
Aparcamiento. Gratuito