Símbolo de Francia, el Camembert forma parte de nuestro diario gourmet. En el espacio de dos siglos, nos ha llegado a ser tan familiar que se considera patrimonio gastronómico nacional. Este producto de la tierra, que representa más allá de nuestras fronteras un cierto lado popular, expresa paradójicamente el refinamiento a la francesa. En 1791, bajo la Revolución Francesa, nació el Camembert a dos pasos de aquí, en la Mansión de Beaumoncel, del encuentro de un sacerdote refractario y de una granjera Augeronne: Marie Harel. En el corazón del pueblo un edificio del siglo XVIII-principios del siglo XIX, la Maison du Camembert ofrece un escaparate al más emblemático de los quesos franceses y rinde homenaje a Marie Harel en los lugares históricos del nacimiento de esta gran saga. Prolongue su visita por la quesería Beaumoncel para descubrir las diferentes etapas de fabricación del Camembert de Normandía gracias a los ventanales que le sumergen en el corazón de los talleres. Desde el moldeado manual, pasando por las bodegas de maduración y el embalaje, el Camembert no tendrá secretos para usted. Al final de su visita, para una conclusión golosa, se propone un plato con 3 partes de Camembert para comparar todos los tipos de Camemberts (pasteurizado, termizado, crudo, ...).