Sumérgete en la historia de este molino
El molino Fabre de Joybert, cuya construcción se remonta al siglo XVII, nos ofrece una visión fascinante de su historia. En el compoix (catastro del antiguo régimen) de La Calmette, fechado en 1669, se encuentra una mención de este molino de viento, entonces propiedad de Philippe d'Ardouin, señor de la Calmette. Un acta notarial de 1708 atestigua que el molino pertenece a noble Isaac d'Ardouin, señor de la Calmette, y es alabado por 4 años a Guillaume Hugues, molinero de Blauzac. En 1713, Jean Louis Mathieu adquiere el molino después de haber comprado el señorío a Isaac de Ardouin. Al año siguiente, en 1714, Jean Louis de Mathieu (futuro de Mathei de Valfons) lo alquila por 4 años al mismo Guillaume Hugues. Los Mathéi de Valfons serán los propietarios durante todo el siglo XVIII. Sin embargo, parece ser abandonado cuando el marqués de Valfons desarrolla el molino cerca de Braune en el siglo XIX. Posteriormente pasó a manos de Valérie Mathei de Valfons, esposa del vizconde Alfred d'André, capitán de fragata y alcalde de La Calmette en los años 1870, y luego a su hija Marie Céline d'André, esposa del barón de Joybert. Por último, la baronesa Clothilde de Joybert, esposa de Georges Fabre, legó el molino a su hijo Antoine, que deseaba, en homenaje a su madre, que el molino fuera bautizado Fabre de Joybert. Antoine Fabre vendió el molino de viento al ayuntamiento de La Calmette, que lo ha restaurado recientemente. Hoy, el molino vuelve a la vida gracias a una asociación con la asociación Cambo Roujo, permitiendo de nuevo la molienda de los granos. ¡Venga a descubrir esta increíble historia durante su visita al molino Fabre de Joybert!