Deambulación de «el hombre lata» en Burdeos
Esta idea de valorización de nuestros residuos es un paso, no solo ecológico y económico, sino sobre todo un impulso de resistencia frente al hiperconsumo de nuestra sociedad. Por eso vemos a varios artistas contemporáneos aprovechar esta iniciativa:
Cuando se vacía de su contenido, se deja tirar como basura en la vía pública, para acabar en la basura. Rehabilitamos y asignamos a los residuos un nuevo destino más expresivo.
La aparición de hombres en la vía pública provoca con el transeúnte una interacción. De asombro, de asombro, de temor. Para el artista, cuando recorre un territorio urbano, su acción con el transeúnte se vive solo en el momento en que se presenta.
Aunque hagan obras sin palabras, los hombres lata hacen mucho ruido; cuando sacuden sus latas como escamas para manifestar su alegría, cuando se inmovilizan como si se hubieran dormido, cuando se acercan entre sí como si pequeño hombre lata buscara refugio y protección cerca de Gran hombre lata.
Este gesto de hombres en lata recuerda el de animales entrevistados en el zoológico o en la televisión o en algunos cuentos que nuestros padres, abuelos, hermanos mayores o hermanas mayores nos contaban cuando éramos niños. A veces un hombre lata interrumpe su marcha, saluda al otro con movimientos bailados. El otro le responde de la misma manera, se pone en marcha, una especie de danza de la que emana una intensidad sugestiva que embarca al transeúnte hacia otro lugar. Luego los 2 hombres latas interrumpen su danza y vuelven a caminar, se instalan en posturas inmóviles como si se imaginaran poder hacerse olvidar creyendo que el transeúnte los confundirá con el mobiliario urbano. Esto es lo que anima nuestro enfoque, al poner en marcha este proyecto.
Con motivo de las Jornadas Europeas del Patrimonio, venga a participar en la caminata del hombre lata: una premisa de lo que le espera en el festival FIAP que se celebrará el 21 y 22 de septiembre de 2023.