La capilla de Ville-d'Avray fue en 1889 el pabellón noruego, representado por la misión evangélica noruega en la exposición universal, el mismo año que la Torre Eiffel, durante el centenario de la Revolución francesa.
Vendida por un franco simbólico en el Consistorio de Versalles, para completar el templo de Bellevue, la capilla se instaló en un pequeño terreno de Ville-d'Avray.
De hecho, tenía que viajar a Sudáfrica, pero los gastos de transporte eran demasiado elevados.
Al principio rectangular, fue ampliada en 1950 con la adición del coro.
En la actualidad, la Pastora de la Iglesia Protestante Unida de Meudon Sèvres Ville-d'Avray preside periódicamente cultos los domingos por la mañana, especialmente durante las vacaciones escolares.