En el budismo Vajrayana existen diferentes formas de mandalas, estructuras complejas pintadas o esculpidas utilizadas para la progresión iniciática, o bien diagrama hecho de arena coloreada que sirve principalmente para la meditación.
El más practicado es el mandala de Kalachakra (la rueda del tiempo), también llamado el mandala de la paz, porque lo tiene todo en cuenta: el cuerpo, la mente, el aspecto exterior cósmico y astrológico. Es capaz de crear paz.
Los monjes Gyuto practican el arte del Mandala desde su inicio en 1475, con gran finura y asociándolos a rituales muy poderosos. Le proponemos asistir a la creación de un mandala de arena realizado por monjes tibetanos que comenzará el sábado 16 de septiembre a partir de las 10:30 y terminará con una ceremonia de disolución el domingo 17 de septiembre a las 17:00.
Al mismo tiempo se les propondrá sesiones cortas de iniciación a la meditación.