El castillo de Cornusse, residencia feudal restaurada a finales del siglo XIX, fue durante mucho tiempo la residencia de verano de los arzobispos de Bourges hasta que la trasladaron (en el siglo XVIII) al castillo de Turly. Además, en una de las chimeneas ornamentales del castillo, se encuentran las armas de Jean Coeur, arzobispo de Bourges en el siglo XV e hijo del Grand Argentier. Propiedad a principios de la III República de las hermanas Triboudet de Maimbray, el castillo pasa a manos de Henri Martin-Zédé a finales del siglo XIX. Este último, ingeniero de origen parisino, era hermano de Georges Martin-Zédé, abogado e industrial que había hecho fortuna junto al chocolatero Menier.

Site patrimonial remarquable y Château, hôtel urbain, palais, manoir

estación de Bourges y estación de Bengy