¡Saint-Pierreville contaba a finales del siglo XIX con más de 2000 habitantes! Un verdadero hormiguero, ocupado en dar forma a las pendientes para vivir en autarquía, desarrollar la industria de los molinillos de seda, gestionar el agua, hacer este país de montaña accesible mediante el acondicionamiento de vías transitables.
Un trabajo titánico y un ingenio notable aplicado por nuestros antepasados para domesticar este país inclinado durante mucho tiempo considerado inaccesible... ¡Te invitamos a descubrir la historia y el patrimonio de este pueblo a través de la vida de los hombres que lo habitaron!