Los jardines y exteriores del castillo de Lorrière, así como su capilla, están abiertos como cada año a los visitantes, que disponen de aparcamiento en la entrada. Construido en el siglo XV en el sitio de una antigua fortaleza arruinada por la guerra de 100 años, ampliada en el siglo XIX, el castillo se inscribe en la historia del renacimiento Angevine. Los jardines dominan un parque que se extiende a lo largo del valle de la Marconne, con abajo el antiguo molino Pichon. Este jardín fue realizado por Renée Bernard de la Frégeolière después de su boda en 1920, sobre los planos del arquitecto paisajista Jules Vacherot que fue en su momento el jefe de los jardines y parques de París. Los pintores de la zona exhibirán obras de arte. La entrada del dominio está marcada por el menhir de Lorrière, que con su dolmen cercano, será objeto este año de una caminata de los megalitos locales.