Salida del cementerio a las 10:30 del domingo La colina forma en Chênehutte un espolón que se transformó en un lugar fortificado mucho antes de la conquista romana. Un establecimiento galo-romano se instaló en el seno de este «oppidum» con calles un foro, tiendas un pequeño templo. Estos restos son visibles por la arqueología aérea. Frente al Cementerio de la comuna tomar el pequeño camino en frente y luego a la izquierda la entrada hacia el antiguo campamento atrincherado, desde esta entrada se encuentra a 7 u 8 metros por encima del suelo; una loma de tierra está reforzada por un muro de piedra que hace frente a la llanura.
El interior del campamento es un óvalo de 370m de largo y 240m de ancho. Numerosas excavaciones en el siglo XIX hicieron aparecer numerosos vértigos (medallas, monedas, alfarería) y este lugar fue designado «campamento romano» en varias obras.
Volviendo hacia la salida tomar a la izquierda para observar los restos de murallas: un poco más adelante un camino rectilíneo toma a la derecha; se trata de una vía galo-romana de enlace hacia la gran vía romana que corre paralelamente al Loira entre Angers y Poitiers
La posición estratégica de Chênehutte se explica por el deseo de controlar el puente que pasaba sobre el Loira (los pilares todavía en su lugar fueron fechados del primer siglo) asegurando la unión entre las dos grandes vías romanas Angers-Tours al Norte y Angers-Poitiers al sur.