¡Nada se pierde... todo cambia!
Una evocación de los comienzos de la Reforma en Bearn, en los lugares, o casi, donde se introdujo.
Visita guiada Desde la plaza de la Deportación en Clemenceau, la ciudad de Pau ha sido el escenario de una historia agitada del protestantismo. La historiadora Claire Moutengou le contará la historia inédita de esta comunidad en el centro histórico de la ciudad.
Entre 1571 y 1617, con la llegada del protestantismo como religión de Estado y el regreso del catolicismo, el Bearn experimentó profundos cambios religiosos. Estos cambios han tenido múltiples implicaciones en la población (que se ha impuesto una nueva confesión), en el gobierno (con discusiones sobre la plaza del monarca y la soberanía de Bearn, que vive sus últimas horas), en la lengua y en el paisaje urbano. Nada se pierde, todo cambia. Los edificios de culto y las fabulosas riquezas de la iglesia católica, acumuladas durante siglos, son inventariadas, cifradas y luego reasignadas, a riesgo de suscitar contenciosos. La reconquista religiosa se lee entonces en la evolución de la ciudad, que cambia rápidamente de fisonomía. ¡Algunas de estas transformaciones son todavía visibles en el corazón de la ciudad, y son testigos de una página importante de nuestra historia para redescubrir!