Dos constructores entran en escena, un narrador, el otro guitarrista. Juntos o por turnos, manipulan un juego de construcción de madera. La letra, la música y las kaplas se responden en eco. La historia comienza, las imágenes aparecen y nos llevan tras las huellas de Iván. Combinando varios motivos de cuentos maravillosos e iniciáticos, Guillaume Alix aborda el tema de Crecer de manera original y poética.
Para facilitar el acceso al castillo, hay un servicio de traslado gratuito: salida desde el aparcamiento de la sala de fiestas de Moulineaux, chemin des Coquelicots.