El Ranelagh ha tenido tres vidas, lo celebramos... En 1894, Louis Mors, fabricante de automóviles, construyó una magnífica mansión en el sitio del antiguo teatro del Castillo de Passy. Pidió al arquitecto Alban Chambon que acondicionara un salón de música todo de roble esculpido, de estilo renacentista flamenco. Valoriza su colección de instrumentos musicales antiguos y organiza "para él y sus amigos" (para retomar la máxima latina inscrita en el frontón de la sala) recitales. Debussy, Wagner viene a mostrar su trabajo. En 1931, el operador de un pequeño cine del distrito, Charles Saint Pouloff, y el comediante Jean Galland retoman la sala y la transforman en un cine que se destaca por la calidad de su programación. Las direcciones se suceden. De 1957 a mediados de los años 70, el pintor surrealista Henri Ginet, antiguo alumno de Fernand Léger y de André Lhote, luego sus dos hijos hacen del Ranelagh una sala "de Arte y Ensayo" y asocian exposiciones y proyecciones de películas. El Ranelagh se convierte en un lugar cinematográfico de la capital, frecuentado por personalidades como Marcel Carné, Arletty, Martine Carol, Vladimir Cosma. Se pueden ver grandes clásicos: Les Enfants du Paradis, Les Visiteurs du Soir, Et Dieu creó la mujer, etc. En 1977, la sala fue clasificada en el Inventario suplementario de los monumentos históricos, mientras que Claude Condroyer y Micheline Daguinot asumieron la dirección del cine (1974 a 1986). En febrero de 1979, primera representación teatral en la sala: J.P. Dusseaux monta La Cantate a tres voces de Paul Claudel. Luego Madona Bouglione (1986-2005) une música, circo y teatro. Hoy, bajo la dirección de Catherine Develay, una programación principalmente dedicada al teatro y a la música toma cuerpo, con el fin de destacar la excelente acústica de la sala, uno de los pocos teatros a la francesa de París.