Venga a descubrir dibujos contemporáneos de los archivos personales del artista.

No me gusta el final de las cosas en general. El final de las vacaciones, del año escolar, de los cumpleaños, de las comidas de Navidad, de una relación. Soy nostálgico y el final de las cosas me pone triste. Que haya pasado demasiado rápido, que ya haya terminado, que no se pueda revivir un instante, volver atrás, volver al principio, empezar de nuevo. Cuando está hecho, está hecho. Habrá otros años escolares, otros aniversarios, otras vacaciones y otras Navidades en familia, pero los que han pasado ya han pasado. Es así y no se puede hacer nada. El tiempo pasa y su sentencia es irrevocable. Pone presión. La de hacer bien, de no equivocarse, de tomar las decisiones correctas y luego de apreciar los momentos presentes también, sin vivirlo pensando que van a acabar. Sin vivirlos pensando que todos vamos a morir.
Quizás por eso me encanta ver mis fotos. A veces por la noche los saco de mi caja, los pongo en mi cama y los miro llorando. - Lucie Morel