La plaza de la iglesia es un lugar de convivencia e incluía en Bernardswiller tiendas de todo tipo.
En los años 1960-1970, se podía encontrar una tienda de mercería, un panadero, un carnicero no sedentario, una tienda de comestibles y no lejos, un bistró propicio para el intercambio de las últimas noticias del pueblo.
En una calle adyacente, vivía en ese momento Mr Eugène Kormann, un niño del pueblo que dejó su huella por sus numerosas acuarelas que muestran nuestras casas más antiguas y las de los municipios circundantes.
Algunos cuadros del pintor serán expuestos en la entrada de la iglesia.
Para empezar, haremos una visita al interior de la iglesia, cuyas vidrieras trazan el Vía Crucis. El coro está decorado con estatutos que relatan la historia del antiguo y del nuevo testamento.
Degustación de vinos orgánicos Motz al final del paseo.