Durante mucho tiempo el deber de Memoria se limitó a Chartres a las conmemoraciones relacionadas con los conflictos en los que Francia y los Chartrains fueron partes interesadas.
Desde hace unos quince años, el municipio ha deseado que la Memoria de la ciudad sea desempolvada y que la memoria no se entienda en el sentido del único homenaje debido a los desaparecidos, sino más ampliamente a lo que constituye la identidad de Chartres, pasado o presente, y que vale ser reconocido.
Monumentos y lugares, personas, pero también lo que se llama patrimonio inmaterial: tradiciones, relatos, conocimientos y usos hortícolas... entre muchos otros.
Abrazar plenamente y celebrar la identidad Chartraine es ahora la ambición del deber de memoria de Chartres. Una ambición a encontrar en exposición, a lo largo del año, en la explanada de la Resistencia.

Espace naturel, parc, jardin