Los cinco artistas plásticos propondrán para esta exposición, inmersa en la oscuridad, obras que guiñan el mundo de la noche y sus aves que se identifican fácilmente gracias a algunos brillantes artificios...
En efecto, sin ser un juego de pista sino más bien un recorrido lúdico con piezas en interacción con los sonidos y la voz de los visitantes, sino también proponiendo a nuestros ojos acostumbrarse a las luces artificiales de los lugares festivos...
Entre elementos característicos de los lugares nocturnos y humor propio de La Porcherie esta exposición hará bailar al visitante de toda su alma... Alimentando esto, un mantel musical creado por un DJ cantará el espacio. Ofreciendo así ambientes musicales en correlación con las obras expuestas.
Para las jornadas europeas del patrimonio, otros de sus correligionarios vendrán a poner también sus colores en esos estratos sonoros y visuales que forman parte del ADN de muchos de nosotros...