El edificio actual no es el original: el 8 de marzo de 1817, una enorme avalancha descendida de la Dent Parrachée daña la antigua iglesia. Una larga disputa (de campanario!) sigue para saber dónde reconstruirla. La comunidad tardará ocho años en construir un nuevo edificio, 200 metros aguas arriba, protegido del peligro.
En el interior, los decorados calientan el corazón: ¡no menos de 5 retablos te esperan! El principal tiene la particularidad de haber sido realizado en 1680 por Molino y Todesco, dos maestros-escultores originarios de la Val Sésia (Piamonte) y no de Haute Maurienne, pero todos tienen características particulares, volutas «en rocallas» o madera policromada, que seducirá a sus pupilas!