Inscrita en el inventario suplementario de monumentos históricos desde 2018, esta indiscutible obra maestra parisina del Movimiento moderno fue construida en 1925 por su hermano André Lurçat (1894-1970). Es la primera de las ocho casas construidas por el arquitecto para artistas, ciudad Seurat, uno de los tres conjuntos urbanos importantes realizados en París en los años veinte. La casa fue levantada en 1930 para crear un segundo taller. Lugar de vida y de trabajo del pintor, mantenido en su estado original con su decoración y mobiliario, la casa fue legada a la Academia de Bellas Artes por Simone Lurçat, la viuda del artista.