Visita libre o guiada de la capilla de Santa Teresa de Hem
La construcción de la capilla es fruto de una iniciativa privada: es a Philippe Leclercq (1899-1980) que corresponde la paternidad de este proyecto en 1952.
La voluntad de crear una obra a la vez artística y espiritual, hecha para durar y marcar su época, llevó a Philippe Leclercq a apelar a Alfred Manessier, a quien pidió que le aconsejara un arquitecto. La elección se refiere a Hermann Baur (1894-1980), miembro de la federación de arquitectos suizos (y que ejerció en Basilea de 1930 a 1972).
Con la voluntad de animar una obra colectiva, el escultor Eugène Dodeigne y el mosaicista Jean Barillet participan en la elaboración del edificio, cuya primera piedra se coloca el 16 de septiembre de 1956. La capilla fue bendecida por el cardenal Liénart el 30 de marzo de 1958.
El pequeño tamaño del edificio ha sido diseñado para responder a la necesidad de adaptar el lugar de culto a la estructura de la comunidad a la que sirve. Un poco hacia atrás, el atrio constituye un lugar preservado por una muralla de verdor. Es en este espacio que se instala el campanario.
La reflexión que se hizo en torno a la construcción estuvo marcada por la preocupación por la integración total de la capilla en el medio ambiente, ya sea humano o geográfico.
El mosaico del alero invita a entrar en la capilla. La puerta se abre sobre una Santa Faz según Rouault, presencia encarnada de Cristo.
El muro acristalado al sur supera la simple función decorativa; el género no figurativo está animado aquí por una auténtica emoción religiosa que permite captar algo del misterio divino.
El vitral de la capilla es característico del arte de Manessier (1911-1993) que, en la fecha de la realización, dejó la representación para el significado.
La contribución posterior de Jean Roulland a la figura del papa Juan XXIII y una cruz procesional completa el conjunto.
De este trabajo de equipo nació esta capilla, cuya ordenación, por encima de las directrices del concilio Vaticano II, permite encontrar las fuentes vivas de la liturgia.
Es una etapa importante que conduce al arte y al público hacia el otro en el contexto de la renovación del arte sagrado, que es una alabanza a la gloria de Dios.
Catalogada como "Monumento Histórico" desde el 30 de agosto de 2012, por la arquitectura y el mobiliario, la descubrirás en el estado más cercano al estado original. Sigue siendo un lugar cultual y cultural abierto a todos y acoge la capellanía de los artistas.
Información: antoine.quidu@yahoo.fr