Visita guiada de la exposición Lucie Cousturier
De una vez crítico de arte de la mirada affuté, pintor néo - impressionniste al talento reconocido, escritora, sacada para el conocimiento y la emancipación del pueblo Negro, Lucie Cousturier presenta, al principio del siglo XX, a una personalidad descompasada. Sus amigos artistas Paul Signac y Maximilien Luce no secan elogios en su lugar, totalmente como el crítico de arte Félix Fénéon.
Pero cuando se es mujer en los años 1900, el talento tan incontestable sea, no basta sacar de la sombra y la artista a los talentos múltiples es totalmente olvidada hoy del gran público.
Muy naturalmente, el museo de Vernon escogió rendir homenaje a esta artista-mujer, presentando la primera exposición monográfica nunca consagrada a Lucie Cousturier. Él persigue así el paso, comprometido desde hace unos años, de valorización de las mujeres artistas (Retratos de mujeres, Rosa Bonheur, Blanche Hoschedé-Monet). Esta exposición también hace eco en la exposición Henri-Edmond Cross, pintar la felicidad, presentada por el museo de los impresionismos – Giverny, cuyo museo de Vernon es compañero. Henri-Edmond Cross, Lucie Cousturier, Paul Signac, Théo van Rysselbergue o todavía Maximilien Luce pertenecen en efecto ellos todos al mismo movimiento néo - impressionniste y se tratan o corresponden regularmente, lo mismo que ellos participan en las mismas exposiciones.
Cerca de 70 obras permiten descubrir la personalidad y el arte de Lucie Cousturier, desde sus estudios sobre autorretratos o naturalezas muertas, hasta la acuarela, que privilegiará al final de su carrera. En el momento de la Primera Guerra mundial en efecto, mientras que ella vive en Fréjus sobre la Costa Azul, un campo de tiradores senegaleses está instalado cerca de su quinta. Fascinada por estos extranjeros, consagrará en lo sucesivo una gran parte de su tiempo que les aprende el francés y se volverá entonces hacia la acuarela y la escritura. En 1920, ella publica el primer cuento, desconocidos en mí, Y, justo después de la guerra, se va para el encuentro de sus nuevos amigos a África occidental francesa (AOF) e informa dos nuevos cuentos así como numerosas acuarelas.
La comisaría científica de la exposición es atribuida a Adèle de Lanfranchi, especialista en la obra del artista y autora de Lucie modista, 1875-1925 (París, 2008).
Si unas unas de las pinturas presentadas provienen de colecciones públicas (musée d’Orsay, museo de Annonciade en Saint-Tropez, museo de Grenoble), una gran mayoría es conservada en colecciones obras privadas y ciertas nunca han sido expuestas antes.
Entrevista de Jeanne-Marie David, responsable del museo, sobre Lucie Cousturier (Radio Campus Ruán): https://soundcloud.com / luc-daireaux / au-miroir-de-clio-avec-jeanne-marie-david-lucie-cousturier-15072018