Antigua iglesia fortificada Santo-Hubert
El desarrollo de los viñedos y de la población en Waville condujo, poco antes el año diez ciento, a los monjes de la abadía de Gorze propietarios de las tierras, a fundar un lugar de culto particular: el oratorio y el aître Santo-Hubert. Al fin de la Edad media, la iglesia Santo-Hubert es fortificada, las cumbres de la nave son realzadas y cubiertas de una terraza bordeada de almenas, la torre que supera(remata) el coro es sobrealzada y dotada de un hourd. En 1736 turno y almenas son afeitados, un tejado es puesto en sitio.
Cementerio primitivo al principio, el aître dio su nombre al cuarto fortificado. Las casas, juntadas ellas unas a otras, forman una muralla en "herradura" en la cual se accede sólo por una entrada principal al pie del porche de la iglesia y dos entradas laterales muy estrechas.