La Abadía de Arthous, en Hastingues, propone a los alumnos y a sus profesores un descubrimiento de la antigua abadía en un formato inédito: actividades de observación, dibujo y juegos...

Estas actividades permiten vislumbrar la historia y los vestigios de un monumento histórico con un enfoque lúdico y sensible.
El descubrimiento comienza con una visita muda donde los alumnos descubren, en silencio, el exterior del monumento y su entorno. Luego comparten una sensación, un color, un material, que los ha interpelado con toda la clase y el mediador.
A continuación, los juegos de observación y dibujo permiten descifrar los detalles que dan testimonio hoy de la historia y la arquitectura del sitio. Un recorrido con espejos permite a los alumnos «caminar» en medio de la carpintería de la iglesia.
Finalmente, maquetas gigantes permiten recrear el plano de la abadía y reconstruir arcos románicos.
El transporte entre el establecimiento escolar y la abadía de Arthous y la mediación están a cargo del Departamento de las Landas.